diumenge, 21 de novembre del 2010

Cent miniatures russes

"Cien miniaturas rusas" és un llibre de l'editorial Bruguera que es va editar l'any 1972 i el vaig comprar poc després. La veritat és que no el vaig donar gaire importància i s'ha passat molt anys a la prestatgeria. Ara, estic repassant els llibres antics i m'he adonat que els veig amb uns altres ulls de quan els vaig comprar.

Quan vaig comprar aquets llibre, vaig anar directe a les obertures que jugava en aquell temps, vaig mirar el que em cridava l'atenció i poca cosa més. Ara el miro i veig unes altres coses.

Ara bé, que entenem per miniatura en escacs. Crec que ho podem definir com una partida curta, tan curta que finalitza a l'obertura. Bé, que finalitza a l'obertura i amb un guanyador.

Però, per què es produeix això? Bàsicament se m'ocorren tres situacions: Un gran error que obligui a abandonar, una novetat teòrica mal defensada i desenvolupar deficienment l'obertura permeten reaccions contundents del contrincant.

Estarem d'acord que la primera situació, les deixades de peces comunament conegudes com a "cagades" ni surten en llibres, ni ens interessen. Les novetats teòriques ràpidament les podem veure a les revistes especialitzades i després als llibres de teoria. Amb que ens trobem que als llibres sobre miniatures el que més hi ha són obertures mal desenvolupades i/o línees antigues obsoletes i que aquestes dues situacións són contundentment castigades.

Això a mi em sembla força didàctic, no tant pel que tenim que jugar sinó com no tenim que jugar. No us a passat mai que jugant una línea teòrica, el vostre contrincant fa una jugada que no està al llibre, no sabem contrarrestar-la i acabem en una posició inferior. La solució està, naturalment, en tenir més coneixements generals del que estem jugant. Però m'he adonat que analitzant miniatures he entès millor algunes posicions.

Us passo una partida d'aquest llibre que crec que és un bon exemple. La partida és entre Ekstein i Laes, jugada al Campeonat de Tallin l'any 1956.




El negre ha jugat Dh4 i el blanc abandona. Però com és que el blanc ha arribat a aquest desastre?


Mirem la partida sencera, els comentaris són els del llibre.







Tenim que aprendre dels nostres errors, però si aprenem dels errors dels altres ens podem estalviar patiments.

Salut i escacs,

11 comentaris:

el sastre de la capa de Luis Candelas ha dit...

Apreciado Roger:

Creo que has recuperado una excelente obra para los aficionados al ajedrez. Veo que tu tienes la edición "de luxe". En abril de 1973 se editó, en la colección "Libro práctico" de Bruguera, la versión rústica, y más económica, 50 pesetas de la época.

Quiero llamarte la atención sobre la partida Kozlov-Gorshkov (eliminatorias del Campeonato de Moscú, 1955), nº 3 del texto. Esta partida se reprodujo entre Ignacio Abascal Vicente y Juan Castelló Obón, ambos del Sant Martí, en el V Torneo Open Festa Major de Sant Andreu (grupo de segundas y terceras), allá por octubre de 1976. Y resultó galardonada con el premio de belleza, eso que se estilaba en la época.

En esos tiempos, los jugadores del Sant Martí empezaban a salir de su cueva fundacional y ya marcaban su impronta allá donde acudían.

Es una más de las leyendas urbanas de la historia del Sant Marti.

Roger Salvo ha dit...

Hola sastre de la capa de Luis Candelas

Muchas gracias por tus palabras y también por la información. No tenía ni idea de lo de la partida del año 1976. Curiosamente i cosas del azar, estuve dudando de poner como ejemplo la partida que he puesto o la que tu comentas. Dicha partida mucho más brillante, un gambito de rey variante Cunningham muy espectacular. No la puse porque requería poner mucha teoría más actualizada, sin embargo la tengo en el Chess Base con largos análisis para la próxima vez que juegue con Monpablo que es el único que me juega el Gambito de Rey.

Por cierto sastre, Luis Candelas te pago la capa? Porque este tipo de gente, a veces, son de poco fiar.

Saludos,

Unknown ha dit...

Este también me trae recuerdos:-) Cuando mis hermanos mayores y yo empezamos a jugar torneos, mi padre sacó de algún cajón los tres o cuatro libros de ajedrez que tenía. No sé cuantas veces miraría las 100 miniaturas, creo que por eso salí agresiva jugando.

el sastre de la capa de Luis Candelas ha dit...

Antaño los jóvenes buscaban las complicaciones teóricas, incluso los del Sant Martí, y jugaban esas cosas. Hoy en día encuentras niños jugando la escandinava o cosas similares. En alguna ocasión lo he dicho, antes había leones y gatopardos, hoy sólo quedan hienas y chacales.

Celebro que valores esa partida como yo. Es de las que hacen afición. Otra cosa es que te pueda servir de algo su análisis y estudio frente a Pablo. Hoy nada más se ven gambitos de rey en rápidas o, como mucho, en ajedrez activo. "Mariconeo lo justo", que dijo Torrente.

Quiero decirle también a Patty que siento una sana envidia hacia ella por la afición al arte del ajedrez que profesaba su padre. En mi casa, cuando gané varias veces a mi padre, que me enseñó a mover las piezas y se lo agradezco, y a mi hermano mayor, se acabó el ajedrez. Es un juego muy tonto.


Así es la vida.

el sastre de la capa de Luis Candelas ha dit...

Otrosí, digo, Roger, me pagaron el trabajo. Las cosas son como son y la gente es más honrada de lo que parece. Te recomiendo "Los ladrones somos gente honrada" de Enrique Jardiel Poncela.

Saludos delincuentes.

Roger Salvo ha dit...

Gracias sastre, seguiré tu consejo. Hace muchos años se hizo una película con este titulo e inspirada en este libro, como siempre pasa en estos casos, una versión libre de los guionistas. El libro debe estar mucho mejor.

Saludos,

Roger Salvo ha dit...

Hola Patty,

Me alegro que mis recuerdos despierten también los tuyos.

Saludos cordiales,

Antonio T. ha dit...

El problema de los libros antiguos es la poca seriedad de los análisis. En esta partida el blanco pierde porque comete un error en su jugada 13.g3??.
En su lugar 13.d5!? es un golpe típico que le permite seguir en la partida, e incluso tras 13.f3 no se ve con muchos problemas.
Eso sí, yo prefiero el golpe d5 una jugada antes 12.d5!.

Roger Salvo ha dit...

Hola Antonio,

Si, tienes razón, los análisis dejan bastante que desear. El ejemplo al cual yo me refería, era el tema de desarrollar rápidamente el caballo dama de las blancas que permite Ab4. Creo que mucha gente no lo hace por inercia, porque en los libros se recomienda Cf3 i el fiancheto de rey, y se hace sin saber muy bien porqué. Algunas miniaturas de este libro me han enseñado el porqué de algunas posiciones.

Saludos,

pedro ha dit...

Hola Salvo, yo también tengo el libro, que me leí en su momento de cabo a rabo, y recuerdo haber jugado una partida muy parecida contra una siciliana, curiosamente poco antes de haber revisado esa partida en el libro. Un saludo.

Antonio T. ha dit...

La superficialidad de los análisis (en remotos tiempos en los que ni se soñaba con los motores de análisis) es disculpable y no deja de ser un muy interesante libro. Creo que se trata de una muy buena selección de partidas y se puede aprender mucho analizándolas.

En este caso yo conocí el tema de g3? Dh4! de éste y de otro libro de Bruguera. En este último se había jugado Ce1 (en lugar de Cd2) y continuó g3? Dh4!- Cf3 Cg5!. Gracias a estos ejemplos yo y muchos otros entendimos mejor posiciones de este tipo en una época en la que había muchos menos libros de ajedrez que en la actualidad.